Punto de encuentro para los lectores de El Camino de la Iguana.
lunes, julio 16, 2007
Conversaciones con Silvina
Agrega tu comentario para Silvina.
3 comentarios:
Anónimo
dijo...
Como yo, aún tenés todo por hacer. Pero creo que en vos, todo parece más fresco y lozano. Como si para vos hubieras más esperanzas. Eso es raro, porque todos tenemos esperanzas...
Hola Vero, lo que me estoy cuestionando es sobre que significa tener esperanzas. Para peor, creo que no se si esperanza viene de esperar o de madurar o no se, se me ocurre ahora, de querer coimear al destino. Te mando un beso.
Seguro que no se puede hacer una analogía entre esperanza y querer coimear al destino. Yo parto de una carga positiva de la palabra, pero se relaciona más con esperar, y en la espera surge cualquier cosa (buena o mala). Tal vez me refería a un futuro sin heridas, pero como todos, indefectiblemente las vas a tener. Y crecerás con ellas y con todo lo bueno que te suceda. Tal vez sea la posibilidad que tenés de vivir siempre en la verdad, en la no transa. Diferentes edades, seguro (aunque yo no sepa la tuya). Sólo creo que es la edad del "aún es posible" cargado de credulidad. Otro beso para vos...
La evolución humana, la batalla entre la intuición y la razón y la constante búsqueda interior se dan cita en El Camino de la Iguana.
¿Cuántas vidas podemos vivir de manera simultánea? ¿Qué es lo real? ¿Es el tiempo una dimensión que pueda calcularse, medirse? ¿Dónde está el niño que fuimos? ¿Existe el pasado? Son sólo algunas de las provocadoras preguntas que surgen al leer esta novela metafísica, circular, en la que el amor, el miedo, la locura y la muerte dan vida a los personajes que, vinculados por la fuerza vital de los afectos, generan verdaderos arquetipos de la evolución.
El tiempo palpitando, la mente racional en jaque permanente, y al final del viaje, el asombro, la eternidad atemporal.
3 comentarios:
Como yo, aún tenés todo por hacer. Pero creo que en vos, todo parece más fresco y lozano. Como si para vos hubieras más esperanzas. Eso es raro, porque todos tenemos esperanzas...
Hola Vero, lo que me estoy cuestionando es sobre que significa tener esperanzas. Para peor, creo que no se si esperanza viene de esperar o de madurar o no se, se me ocurre ahora, de querer coimear al destino.
Te mando un beso.
Seguro que no se puede hacer una analogía entre esperanza y querer coimear al destino. Yo parto de una carga positiva de la palabra, pero se relaciona más con esperar, y en la espera surge cualquier cosa (buena o mala). Tal vez me refería a un futuro sin heridas, pero como todos, indefectiblemente las vas a tener. Y crecerás con ellas y con todo lo bueno que te suceda. Tal vez sea la posibilidad que tenés de vivir siempre en la verdad, en la no transa. Diferentes edades, seguro (aunque yo no sepa la tuya). Sólo creo que es la edad del "aún es posible" cargado de credulidad.
Otro beso para vos...
Publicar un comentario